9/11/11

BUSCANDO UN SUEÑO: Prefacio

Hoy, como adelanté ayer, vengo cargada de ilusiones con la reposición de Buscando un sueño.

Y os dejo con este prefacio que he escrito hoy mismo. He querido hacer algo inédito de esta historia para empezarla. El domingo ya sí que empezamos con los capítulos.

Y quiero agradecer enormemente a mi querida Bonnie toda la confianza que depositó en su día al confiar en mí y en mi historia. Y por supuesto, el dejarme esta preciosa portada para publicarla aquí.

Sin más dilaciones, os dejos con este prefacio inédito, y gracias por estar nuevamente ahí.



PREFACIO:


BELLA

¿Cómo debe ser sentirse en mitad de la nada?
Así me sentía yo. En el centro de la nada. Total oscuridad a mi alrededor, que por más que abriera los ojos, no veía nada.
Dicen que el frío no existe, simplemente es la ausencia de calor. El frío es nada entonces. Y así lo sentía yo por todo mi cuerpo. Estaba helada.
Pero no era la nada lo que llenaba mi cabeza, sino el miedo. Un miedo irracional que me tenía completamente paralizada. Mis pies estaban clavados en el suelo de la nada. Mis piernas temblaban, amenazando con doblarse y dejarme caer allí, en la negrura que me rodeaba.
Y de la nada surgió un leve sonido continuo, rompiendo el atroz silencio que me envolvía. Me sobresalté al principio, mas cuando en apenas un segundo comprendí que era un jadeo, una respiración a mi lado, mi corazón se desbocó queriendo salir de su sitio por falta de espacio.
Instintivamente me giré hacia esa respiración, y algo rozó mi mano.
Quise gritar pero de mi boca no salió nada. Aquello que me había rozado, me la había tapado antes de emitir grito alguno.

-¡Ssshhhh! Beeellaaaaa,… no grites. Soy yo –La voz de Edward susurró entonces en mi oído, sintiendo su aliento, tan frío como la nada en mi cuello. Su aroma, exquisito, llenó la nada embriagándome –. No temas mi amor, pronto estaremos juntos,… para siempre.


Sus brazos me rodearon, fríos y duros como el mármol. No estaba en absoluto a gusto con él, pues lo notaba diferente. Tenía la sensación visceral de estar en peligro. Me giré para poder verle la cara, y al subir la mirada hacia él, vi sus ojos, rojos como la sangre, resplandecientes como su piel; en toda la infinita oscuridad de la nada.
No hubo mano alguna que pudiera acallar el grito que mis pulmones impulsaron por mi garganta. Grito que debió de despertar a medio vecindado de Denver. Del impulso me senté en la cama. Al otro lado de la pared oí a mi padre:

-¡Bella! ¿Estás bien? –se le notaba preocupado a pesar de su voz adormilada, pero ya se había acostumbrado a mis gritos y llantos cuando soñaba con Edward.
-Sí papá –lo tranquilicé, no quería hacerlo salir de la cama, como tantas otras veces–. No te preocupes, es otra pesadilla.
-¿Necesitas algo?
-No, gracias.
-Vale. Pues,… buenas noches.
-Buenas noches, papá.

Miré el despertador. Las cuatro de la madrugada. Aún faltaban unas cuantas horas para que amaneciera. Me tumbé otra vez en la cama mientras por mis mejillas resbalaban, silenciosas, varias lágrimas. Y con el corazón encogido todavía, aferrada a su recuerdo, me abandoné a los brazos de Morfeo nuevamente, deseando que éste me acogiera en sus brazos y que por una vez no me atormentara en ellos.

5 comentarios:

D. C. López dijo...

Precioso!, un prefacio exquisito!. Menuda pesadilla ha tenido nuestra kerida Bella... aunke si yo me despertara (o creyera hacerlo) en medio de la noche y me encontrase a Edward en mi cama, no gritaría seguro!, jajaja.

Un beso guapa y gracias por pasarte x el club e invitarme a leerte.

Xao!!!

Iris Martinaya dijo...

Como ya te comenta Dulce, exquisito prefacio. Me ha gustado mucho como describes esa nada, esa oscuridad, el frío, la desolación absoluta que siente Bella, que la acosa hasta en sus sueños. ¡¡Perfecto comienzo!!

Yo si me encontrara a Edward en mi cama, si que gritaba!!! Más, más Edie, jeje.

Un beso

J.P. Alexander dijo...

Jje me gusto muy bello y bien escrito un beso.

Arantxa dijo...

Menudo prefacioplo mi LUZ; coincido con las compañeras en lo referente a Edward, yo si me lo encontrara en la cama no se yo si ... jejejeje.

Un besazo mi LuZ, me encanta la forma de escribir que tienes, nunca me cansare de decírtelo.


Bonnie

Lu Morales dijo...

Pues yo si me lo encuentro en mi cama, lo arroparía que se resfría con el frio que está haciendo ya.

GRacias por vuestros comentarios, y por la cariñosa acogida que estaís dando a esta historia.

Besos!!